miércoles, 16 de julio de 2008

VIVA URIBE, PERO HASTA 2010


Si alguien tenía duda que Álvaro Uribe Vélez fuera el presidente más exitoso de Latinoamérica en la actualidad, el rescate de Ingrid Betancourt, los tres norteamericanos y otros once secuestrados por la narcoguerrilla de la FARC, quita toda duda. Rodeado de países con presidentes izquierdistas e impregnados del sarampión populista con que se ha infectado el continente, ha conducido al país en una senda de progreso y estabilidad económica, mientras que avanza y consolida la paz en Colombia, derrotando militar y políticamente a los movimientos guerrilleros y paramilitares.

Sus principales aval y por el cual mantiene más del setenta por ciento de aprobación, son los éxitos conseguidos por su política de seguridad democrática. A diferencia de las doctrinas de la seguridad nacional que justificaron las dictaduras latinoamericanas en décadas pasadas, Uribe demuestra, al igual que Venezuela en los sesenta que una política de paz puede desarrollarse en el marco de la democracia.

Sin embargo, en el año 2006, con la crisis de los partidos tradicionales, había que garantizar la continuidad de la política de Uribe, no fuera que un descendiente de Samper o Pastrana, desbaratara lo que claramente estaba dando frutos. La reelección de Uribe, fue entonces una necesidad circunstancial, dentro de unas reglas de juego que se considera razonable para cualquier democracia, la reelección por una sola vez.

Pero hay que advertir los riesgos que existen para la democracia colombiana si Uribe decidiera e impusiera una nueva reelección. En la práctica se estaría consolidando un gobierno autoritario, bajo el pretexto de la continuidad de política de seguridad democrática. Hoy no hay riesgos que esta política sea cambiada por la vía electoral. Todo candidato que quiera tener posibilidades de triunfo electoral deberá garantizar la continuidad de esta política de Uribe. Por tanto, lo que hay que considerar es la continuidad de la obra, pero de la mano de otros líderes, y por las muestras sabemos que en su equipo, gente con méritos, hay de sobra.

No hay comentarios: