viernes, 26 de junio de 2009

LO QUE LE IMPORTA AL GOBIERNO



Una simple mirada a los periódicos dan cuenta que el país parece caerse a pedazos. Perdón, dejemos la sutileza, se esta cayendo a pedazos. Las víctimas fatales del hampa se cuentan entre dos cifras altas o tres cifras bajas por semana. Las empresas se paralizan por falta de dólares. La corrupción hace de las suyas y servicios que antes funcionaban al ser tocada por la mano visible del estado, se desmejoran inexorablemente. El país se paraliza, en parte por la crisis mundial, pero en parte, por la arremetida feroz del gobierno contra el sector privado y contra la descentralización.
Mientras la revolución avanza a paso de vencedores, Rialca sigue sin abrir sus puertas, General Motors suspende operaciones e Invial anuncia que gracias al traspaso de los peajes, 180 trabajadores quedarán sin empleo. Ciudad Ojeda parece un cementerio, y una de sus pobladoras Ramona que antes a las diez de la mañana había vendido todas sus empanadas, ahora si acaso vende para reponer la compra de guiso y harina pan para el día siguiente y mal comer ese día.
Lamentablemente nada de eso parece importarle al Gobierno. Mientras el venezolano se tiene que enfrentar diariamente a la delincuencia, al aumento de la cesta básica, a la perdida de sus trabajos y a los malos servicios, el gobierno mira hacia otro lado. Más importante que los muertos diarios, es “el exceso de libertad” de expresión. En lugar de acabar con los malandros, prefiere ocuparse de Globovisión.
Más importante que las divisas para las materias primas es el peligrosísimo movimiento desestabilizador, que coloca en los parabrisas de los vehículos “Con mis hijos no te metas”. Ante el rumor de un folleto que supuestamente alertaba de la arremetida gubernamental sobre la educación, y por denuncia de Mario Silva, el gobierno responde mandando un contingente de las fuerzas armadas al Juan XXIII y realizando una supervisión permanente a uno de los colegios que mejor desempeño tienen en nuestra deplorable educación.
Más que preocuparse de la parada brusca de la economía le importa es la popularidad que pudieran adquirir las autoridades de la alternativa democrática y que en su gestión hagan algo que ponga al hiperlíder en segundo plano. Más importante que Caracas, es que esta no sea gobernada por Ledezma. Más importante que la vialidad es que no esta no sea administrada ni por los Salas, ni los Pérez ni los Radonski. En fin, si a ver vamos, a este gobierno solo le importa una sola cosa y dicho en criollo, que no lo saquen del coroto.

martes, 16 de junio de 2009

GRIEGOS Y AZTECAS


Hay dos hechos históricos que no dejan de ser admirados por quienes gustan de estos temas. Son dos proezas logradas por contingentes humanos en condiciones de profunda desventaja. Podemos acordar que la historia no se repite, pero da lecciones que pueden servir de ejemplo.
La primera proeza es el enfrentamiento de los griegos contra los persas en la segunda guerra médica. En aquella ocasión y para evitar la derrota de la primera invasión Persa en territorio griego ocurrida en Maratón, Jerjes quien deseaba conquistar Grecia organizó un ejército que los historiadores actuales calculan en quinientas mil soldados. Evidentemente fue el mayor esfuerzo bélico realizado por pueblo alguno en toda la edad antigua. Ante tal amenaza, espartanos, atenienses o tebanos tuvieron que dejar sus diferencias y sencillamente unirse para afrontar un enemigo que amenazaba con acabar con los cimientos de la sociedad y transformar profundamente su cultura, cambiar sus dioses y hasta acabar con su existencia.
Los Espartanos dieron la vida de su rey Leonidas y su legión de guerreros para detener a los persas en el paso de Termópilas. Este hecho fue fundamental para que el resto de las ciudades se prepararan para los futuros combates, especialmente la que diera la flota Ateniense en Salamina y realizar el golpe final en Platea. El mayor ejército que se hubiera organizado fue finalmente derrotado por el tesón, inteligencia y espíritu de sacrificio de un pueblo.
La segunda proeza, más que de un pueblo fue la realizada por un grupo de aventureros. Hernán Cortés, con un grupo que apenas superaba a las quinientas personas, pudo conquistar el poderoso imperio Azteca y fundar las bases del dominio español en lo que hoy es el territorio mexicano. Si bien hay elementos fortuitos, como la epidemia de Viruela que diezmó a la población indígena o el extraño parecido de los españoles a la imagen de sus dioses que permitió que éstos fueran bien recibidos, el triunfo de Cortés se debió a la complicidad de las tribus dominadas por los Aztecas víctima de su crueldad. Cortés pudo llegar y dominar a un imperio que sencillamente era odiado por sus súbditos.

miércoles, 3 de junio de 2009

CONTRA TODA MINORÍA


El Mito: La gente quiere votar por nombre y apellido. Eso no son más que buenas intenciones y de ellas está empedrada el camino al infierno. Creo que he comentado en varias ocasiones la tesis de Anthony Downs sobre la ignorancia racional de los votantes. La gente racionalmente decide ocuparse primordialmente de sus asuntos privados en lugar de los asuntos públicos, así que por tanto, sus niveles de información sobre los temas político son por lo general pobres. Así que no les pida a los electores que discrimine en toda la fauna de candidatos que se presenten en una contienda por el voto legislativo, quien es cada quien, que examine sus currículo para conocer su honestidad y diligencia, este al tanto de sus propuestas y las compare con sus valores y creencias y ponga a prueba la factibilidad de sus promesas, para luego de sopesar todos elemento, votar. Por supuesto puro gamelote.
Si esto es verdad para cualquier parte del mundo, en Venezuela la polarización del ambiente político ha reducido la indagación electoral a solo dos preguntas ¿Quién es el candidato de Chávez? para un sector o ¿Cual es el candidato de la oposición? para el otro. De tal manera, que en la decisión, a pesar de los nombres, de los candidatos por iniciativa propia, el comportamiento del elector es muy similar al que hubiera si existieran solo planchas cerradas de partidos, como era en las primeras décadas de la democracia. Las muestras son mas que fehacientes, cualquier encuesta revelaría que los ciudadanos que conocen quienes son sus representantes sus parlamentos no supera el 5% en la mayoría de los casos.
Cuando se comentó lo del camino al infierno, creo no estar muy lejos de la realidad. Si pensamos que en el reino de la justicia democrática, uno de sus principios fundamentales que debe ser respetado es la representación proporcional de las minorías, entiéndase donde la composición de los parlamentos debe reflejar en porcentajes de escaños el voto de los ciudadanos, en Venezuela debemos estar en el purgatorio.
En la elección uninominal absoluta que se realizó en Venezuela para escoger a la Asamblea Nacional Constituyente, el resultado no pudo ser más gráfico, con el 55% de los votos los partidarios de Chávez dominaron más del 90% de los escaños.
Venezuela ante la presión de los románticos uninominalistas que propugnaba el voto por nombre y apellido, pero reconociendo el peligro para la representación proporcional, acogió una modalidad parecida al sistema mixto Alemán, que combina el voto lista y el voto nominal, en una proporción donde 60% de los escaños se escogen por nombre y el 40% restante de las planchas cerradas presentadas por los partidos, pero sustrayendo por cada representante electo uninominalmente, uno de la lista. De esta manera la representación proporcional de la minoría, no queda tan afectada.
Una triquiñuela de los partidarios del Gobernador de Yaracuy Eduardo Lapi en las elecciones realizadas en el año 2000, que consistió en postular en partidos distintos los candidatos nominales y los de la plancha, le permitió apoderarse de la casi totalidad de los cargos de la Asamblea Legislativa del Estado Yaracuy. Esta práctica que se comenzó a llamar como “Las Morochas” fue perfeccionada y masificada por los seguidores de Chávez, y posteriormente “legitimada” por el Tribunal Supremo de Justicia. El resultado ha sido una preponderancia de las mayorías electorales, que obtienen por esta vía sobrerrepresentación en los órganos deliberantes de Venezuela.
El proyecto de Ley Orgánica de Procesos Electorales, hace innecesario la utilización de las morochas, puesto que distorsiona el sistema mixto escogido, al eliminar la incidencia del voto nominal en el voto lista, favoreciendo en la práctica la sobre-representación de los partidos mayoritarios en la conformación de los parlamentos. Elimina las morochas, pero también elimina la representación proporcional, garantía de la participación de los partidos minoritarios en los cuerpos legislativos.
Dos proposiciones:
Quizás parezca un contrasentido histórico, pero si se acepta que el comportamiento real del votante esta muy lejos de la votación uninominal, la mejor manera de garantizar la representación proporcional de las minorías es a través de reimplantar el tradicional método de elección por listas cerradas y asignar los cargos por cociente de votos.
La segunda posibilidad, es que el nuevo instrumento legal mantenga la incidencia del voto nominal sobre el voto lista que establece la ley actual, pero estableciendo la obligatoriedad de los partidos de presentar para cada elección parlamentaria en donde decida participar, candidatos en planchas y candidatos nominales. Así no habrá morocha que valga y que se utilice para irrespetar el voto de los venezolanos.